LA
MORFOLOGÍA SOCIAL
La morfología social es
una rama de la sociología que estudia los aspectos de la vida colectiva que
definen la realidad del grupo, en relación con el medio natural y social. Según
Durkheim, la morfología social incluye el estudio de la densidad, la
distribución, el empleo y la estructura de la población, así como las formas de
organización social y territorial. La morfología social también se aplica al
análisis de las grandes ciudades y su estatuto sociológico.
PLANIFICACIÓN
SOBRE LA MORFOLOGÍA SOCIAL
Introducción: Se explica
el concepto de morfología social como el estudio de los aspectos de la vida
colectiva que definen la realidad del grupo, en relación con el medio natural y
social. Se mencionan algunos autores que desarrollaron esta perspectiva, como
Durkheim y Halbwachs. Se plantea el objetivo de la clase: analizar la
morfología social de la ciudad de Buenos Aires y sus cambios a lo largo del
tiempo.
Desarrollo: Se divide la
clase en grupos y se les entrega un mapa (o en su defecto se les da un barrio o
una zona) de la ciudad de La Plata. Se les pide que identifiquen y describan
las características morfológicas de cada zona, teniendo en cuenta aspectos como
la densidad, la distribución, el empleo, la estructura, la organización y la
cultura de la población. Se les sugiere que utilicen fuentes como el censo,
estadísticas, medios de comunicación, testimonios, etc. Se les da un tiempo
para realizar la tarea y luego se les pide que expongan sus resultados al resto
de la clase.
Cierre: Se realiza una
puesta en común y se discuten las similitudes y diferencias entre las zonas
analizadas. Se reflexiona sobre los factores que influyen en la morfología
social de la ciudad, como la historia, la economía, la política, el ambiente,
etc. Se evalúa el aprendizaje de los alumnos mediante preguntas o actividades.
DURKHEIM
y HALBWACHS
Émile Durkheim y Maurice
Halbwachs son dos sociólogos franceses que desarrollaron el concepto de
morfología social como el estudio de los aspectos de la vida colectiva que
definen la realidad del grupo, en relación con el medio natural y social. Según
ellos, la morfología social incluye el estudio de la densidad, la distribución,
el empleo y la estructura de la población, así como las formas de organización
social y territorial.
Durkheim fue el primero
en acuñar el término morfología social y en darle sus primeros contenidos,
relativos al estudio del sustrato material de las sociedades y de las
poblaciones. Durkheim consideraba que la morfología social era un factor
determinante para el tipo y el grado de solidaridad social que se establecía
entre los individuos. Durkheim también introdujo el concepto de hecho social
como una realidad externa y coercitiva que condiciona el comportamiento de los
individuos.
Halbwachs fue un
discípulo de Durkheim que llevó más lejos la definición durkheimiana de la
morfología social, ampliando su contenido y sus límites. Halbwachs aplicó la
perspectiva morfológica para el examen de la estructura de las grandes ciudades
y la caracterización de su estatuto sociológico. Halbwachs también desarrolló
el concepto de memoria colectiva como una construcción social que depende de
los marcos sociales de referencia.
LAS
SOCIOLOGÍAS PARTICULARES
Las sociologías
particulares son ramas de la sociología que se enfocan en el estudio de
sectores limitados de la realidad social, como la economía, la política, el
derecho, la educación, etc. Cada una de estas sociologías particulares tiene su
propio enfoque y métodos, pero comparten los principios y conceptos de la
sociología general. Algunos autores distinguen cuatro grandes paradigmas o
corrientes teóricas dentro de las sociologías particulares: el funcionalismo,
el marxismo, el interaccionismo simbólico y la teoría crítica².
FUNCIONALISMO
El funcionalismo es una
corriente teórica surgida en el siglo XIX que considera que la sociedad es un
sistema complejo cuyas partes se relacionan entre sí para mantener el orden y
la estabilidad. El funcionalismo se basa en la idea de que cada elemento de la
sociedad cumple una función específica y necesaria para el conjunto. Por
ejemplo, la familia, la educación, la religión, el derecho, etc., son
instituciones sociales que contribuyen al equilibrio y la cohesión social.
El principal representante
del funcionalismo fue el sociólogo francés Émile Durkheim, quien propuso el
concepto de hecho social como una realidad externa y coercitiva que condiciona
el comportamiento de los individuos. Durkheim también introdujo el concepto de
solidaridad social como el vínculo que une a los miembros de una sociedad.
Según Durkheim, existen dos tipos de solidaridad: la mecánica y la orgánica. La
primera se basa en la similitud y la homogeneidad de los individuos, mientras
que la segunda se basa en la diferenciación y la complementariedad de los roles
sociales.
Otro exponente del
funcionalismo fue el sociólogo estadounidense Talcott Parsons, quien desarrolló
la teoría de la acción social como un modelo para explicar cómo los individuos
actúan en función de sus fines, valores, normas y expectativas. Parsons también
elaboró el concepto de sistema social como un conjunto de acciones
interrelacionadas que persiguen un equilibrio dinámico. Según Parsons, los
sistemas sociales se componen de cuatro subsistemas: el cultural, el social, el
de personalidad y el orgánico. Cada uno de estos subsistemas cumple una función
específica para el mantenimiento del sistema: adaptación, consecución de
objetivos, integración y latencia.
El funcionalismo ha sido
criticado por diversos autores por su visión conservadora, estática y normativa
de la sociedad. Algunas de las críticas que se le han hecho son las siguientes:
- Ignora o minimiza los
conflictos, las desigualdades y los cambios sociales.
- Asume que todas las
partes de la sociedad son funcionales y necesarias, sin cuestionar su origen o
su legitimidad.
- No explica cómo se
generan o se modifican las funciones sociales ni cómo se pueden cambiar las
estructuras sociales.
- No reconoce la capacidad de acción y transformación de los individuos ni sus intereses y motivaciones.
MARXISMO
El marxismo es una
corriente teórica surgida en el siglo XIX que considera que la sociedad es un
sistema contradictorio y conflictivo, determinado por las relaciones de
producción y la lucha de clases. El marxismo se basa en la idea de que la
historia es el resultado de la confrontación entre los grupos sociales que
poseen los medios de producción o clase dominante, y los grupos sociales que
solo poseen su fuerza de trabajo o clase dominada. Por ejemplo, la burguesía,
el proletariado, los campesinos, etc., son clases sociales que se enfrentan por
el control de los recursos y el poder.
El principal
representante del marxismo fue el filósofo, economista y sociólogo alemán Karl
Marx, quien junto con su amigo y colaborador Friedrich Engels, elaboró una
crítica radical al capitalismo y una propuesta revolucionaria para superarlo.
Marx y Engels se inspiraron en las ideas de la filosofía alemana, la economía
política inglesa y el socialismo francés. La obra más importante del marxismo
es El Capital, donde Marx analiza las leyes del funcionamiento del modo de producción
capitalista y sus contradicciones internas.
Otro exponente del
marxismo fue el político y revolucionario ruso Vladimir Lenin, quien adaptó las
ideas de Marx y Engels a las condiciones de Rusia a principios del siglo XX.
Lenin fue el líder de la Revolución Bolchevique de 1917, que estableció el
primer Estado socialista del mundo. Lenin desarrolló conceptos como el
imperialismo, el partido de vanguardia, la dictadura del proletariado y el
socialismo en un solo país.
El marxismo ha sido
criticado por diversos autores por su visión determinista, economicista y
totalitaria de la sociedad. Algunas de las críticas que se le han hecho son las
siguientes:
- Ignora o subestima
otros factores que influyen en la historia y la cultura, como la religión, la
ideología, la moral, etc.
- Asume que todas las
sociedades pasan por las mismas etapas históricas y que el comunismo es el fin
último de la humanidad.
- No explica cómo se
puede construir una sociedad sin clases ni explotación económica ni cómo se
puede evitar la burocratización y la corrupción del poder.
- No reconoce la diversidad y la pluralidad de los intereses y las identidades de los individuos ni sus derechos y libertades.
EL
INTERACCIONISMO SIMBÓLICO
El interaccionismo
simbólico es una corriente teórica que surge en la sociología y la psicología
social, y que se basa en la comprensión de la sociedad a través de la
comunicación y los símbolos. El interaccionismo simbólico se sitúa dentro del
paradigma interpretativo, que analiza el sentido de la acción social desde la
perspectiva de los participantes.
El interaccionismo
simbólico sostiene que las personas actúan sobre los objetos y las personas de
su mundo en función de los significados que tienen para ellas. Estos
significados son producto de la interacción social, especialmente la
comunicación verbal y no verbal. Además, las personas pueden modificar los
significados en función de sus propósitos y expectativas, mediante procesos
interpretativos.
El principal
representante del interaccionismo simbólico fue el filósofo y psicólogo
estadounidense George Herbert Mead, quien desarrolló el concepto de self o yo
como el resultado de la internalización de los roles sociales y las
expectativas de los otros significativos. Mead también introdujo el concepto de
mente como la capacidad de usar símbolos para comunicarse consigo mismo y con
los demás.
Otro exponente del
interaccionismo simbólico fue el sociólogo estadounidense Herbert Blumer, quien
acuñó el término en 1938 y lo sistematizó en tres premisas básicas: las
personas actúan sobre las cosas en función de los significados que tienen para
ellas; estos significados surgen de la interacción social; y estos significados
se modifican mediante la interpretación.
El interaccionismo
simbólico ha sido criticado por diversos autores por su visión subjetivista,
individualista y relativista de la sociedad. Algunas de las críticas que se le
han hecho son las siguientes:
- Ignora o minimiza las
estructuras sociales, las desigualdades y los conflictos que condicionan la
acción y la comunicación.
- Asume que todos los
actores sociales tienen las mismas capacidades y oportunidades para definir y
negociar los significados.
- No explica cómo se
originan o se cambian los símbolos ni cómo se pueden establecer criterios de
validez o verdad.
- No reconoce la influencia de factores no simbólicos, como las emociones, los instintos o las necesidades.
LA
TEORÍA CRÍTICA
La teoría crítica es una
corriente teórica que surge en la filosofía y las ciencias sociales, y que se
propone analizar y transformar la sociedad desde una perspectiva emancipadora y
reflexiva. La teoría crítica se opone al positivismo y al funcionalismo, que
considera como formas de legitimar el orden social dominante y de ocultar las
contradicciones y los conflictos que lo atraviesan.
La teoría crítica tiene
su origen en la Escuela de Frankfurt, un grupo de intelectuales alemanes que se
reunieron en el Instituto de Investigación Social de la Universidad de
Frankfurt a partir de 1923. Entre sus principales representantes se encuentran
Max Horkheimer, Theodor Adorno, Walter Benjamin, Herbert Marcuse, Erich Fromm y
Jürgen Habermas. La Escuela de Frankfurt combinó elementos del marxismo, el
psicoanálisis, la filosofía occidental y la crítica cultural para elaborar un
diagnóstico crítico de la modernidad y sus efectos negativos sobre la razón, la
cultura y la subjetividad.
La teoría crítica se
caracteriza por los siguientes rasgos:
- Es una teoría
interdisciplinaria, que integra diversos campos del saber como la filosofía, la
sociología, la economía, la política, la psicología, el arte, etc.
- Es una teoría
dialéctica, que reconoce la complejidad y la contradicción de la realidad
social y que busca superar las oposiciones simplificadoras entre sujeto y
objeto, teoría y práctica, estructura y acción, etc.
- Es una teoría
normativa, que no se limita a describir o explicar la realidad social sino que
también propone criterios para evaluarla y transformarla en función de valores
como la libertad, la justicia, la igualdad, etc.
- Es una teoría
reflexiva, que cuestiona los supuestos y los intereses que subyacen a las
formas dominantes de conocimiento y que se somete a sí misma a un proceso de
autoexamen crítico.
La teoría crítica ha abordado diversos temas y problemas de la sociedad contemporánea, como la racionalización, la industria cultural, la alienación, la autoridad, la democracia, la comunicación, etc. También ha generado diversas corrientes y enfoques dentro de su propio campo, como la teoría crítica de la sociedad, la teoría crítica del derecho, la teoría crítica de la educación, etc.