Tuesday, 22 April 2014

Martes Santo

“Jesus said to her, ‘Woman why are you weeping? Whom do you 

seek?’ Supposing him to be the gardener, she said to him, ‘Sir, if 

you have carried him away, tell me where you have laid him, and I

will take him away.’ Jesus said to her, ‘Mary.’ She turned to him

and said to him in Hebrew, ‘Rabbo’ni!’”

2 comments:

Anonymous said...

Cuando Roncalli fue nombrado cardenal, la birreta escarlata le fue impuesta por el presidente francés Vincent Auriol (ateo y francmasón del grado 33° R.E.A.A.)

http://3.bp.blogspot.com/-dpTJq_yg1nk/UzI-UfQLGqI/AAAAAAAAEWg/4ITmAb43R6Q/s1600/roncalli-e-auriol-e1377018302555.jpg



http://caballerodelainmaculada.blogspot.com.ar/2014/04/el-beato-que-trajo-la-desgracia-la.html

Anonymous said...

El 14/4/82, en la plaza de San Pedro, dijo: “En las palabras de Cristo no hemos de ver una valoración superior de la virginidad o del celibato respecto al matrimonio”. Esto, en oposición a la enseñanza del Evangelio, del Concilio de Trento y de Pío XII, y siguiendo la herejía de Joviniano (cfr. Joviniano 82, G. Corbi, Buenos Aires, ed. Iction).
El 25/5/82 asiste a un culto religioso anglicano en Canterbury, Inglaterra. El 25/5/83 “promulga” un nuevo “Código de Derecho Canónico”, el cual, entre otras cosas, permite a los católicos recibir los sacramentos de la Penitencia, Eucaristía y Extremaunción de manos de ministros no-católicos y, a su vez, permite a ministros católicos administrar dichos sacramentos a los no-católicos (can. 844). Además, dicho código suprimió la excomunión de los masones.
El 11/12/83 predica en un templo luterano en Roma y recita una oración compuesta por Lutero.
El 22/3/84 afirma ante la logia masónica judía B’nai Brith, que el diálogo entre católicos y judíos es un diálogo “entre la primera y la segunda parte de la Biblia” (Juan Pablo II y el judaísmo, ed. Paulinas, Buenos Aires, 1988, pág. 98).
El 6/5/84, en Seúl, Corea, dirige “un saludo especial a los miembros de la tradición budista que se están preparando a celebrar la festividad de la venida del señor Buda” (L’Osservatore Romano, 20/5/84).
El 7/5/84, en Nueva Guinea, “una mujer con los senos descubiertos leyó hoy párrafos de la Biblia durante una misa celebrada por Juan Pablo II” (La Nación, Buenos Aires, 9/5/84).
El 11/12/84 envió un representante a la colocación de la primera piedra de la mayor mezquita de Europa.
El 9/5/85: “Es una alegría particular poder recibiros a vosotros... que seguís la fe del Islam, venidos a Roma para el coloquio sobre ‘la santidad en el Cristianismo y en el Islam’... Como lo he dicho a menudo en otros encuentros con mahometanos, tenemos un solo y mismo Dios y somos hermanos y hermanas en la fe de Abraham... Vuestro Santo Corán llama a Dios ‘Al-Quddus’”...
En mayo de 1985, un documento oficial del Vaticano [que luego Juan Pablo II cita en la Sinagoga] afirma que “el pueblo de Dios de la Antigua y de la Nueva Alianza, tiende hacia metas análogas, la venida o el retorno del Mesías”. E invita a los cristianos a unirse a los judíos para “preparar el mundo a la venida del Mesías” (L’Osservatore Romano, 26/5/85).
El 8/8/85, en Togo, África, asiste a rituales vudú.
El 2/2/86, “en viaje por la India recibió primero en la frente, de una sacerdotisa hindú, ‘el signo de reconocimiento de los adoradores de Shiva’ y el 5 de febrero, en Madrás, de manos de otra, ‘se dejó aplicar en la frente el tilak, o tika, la pastilla de polvo rojizo de los adeptos al hinduismo’” (La Nación, 21/2/86).
Al “Centro Hope de Jerusalén para la comprensión y la reconciliación interreligiosa”: “Venís de una ciudad que significa mucho para todos nosotros: judíos, cristianos y musulmanes. Jerusalén, la ciudad de David, el lugar de la muerte y resurrección de Jesús, el escenario del viaje nocturno de Mahoma hacia Dios” (L’Osservatore Romano, 9/3/86).
El 13/4/86 visita la sinagoga de Roma, participa en la recitación de salmos, reconoce que la Iglesia persiguió a los judíos, y dijo dirigiéndose a ellos: “Sois nuestros hermanos predilectos y en cierto modo se podría decir, nuestros hermanos mayores” (L’Osservatore Romano, 20/4/86).
El 27/10/86, Juan Pablo II convocó a “los representantes de las religiones del mundo” para “un encuentro de oración por la paz”, en la ciudad de Asís. Entre otros sacrilegios realizados en ese lugar, unos bonzos incensaron una estatua de Buda en la Iglesia de San Pedro (L’Osservatore Romano, 2/11/86).
El 30/12/87 en la “encíclica” Sollicitudo Rei Socialis, dijo: “Quiero dirigirme especialmente a quienes por el sacramento del bautismo y la profesión de un mismo credo, comparten con nosotros una verdadera comunión, aunque imperfecta [refiriéndose a herejes y cismáticos]”.
http://caballerodelainmaculada.blogspot.com.ar/2014/04/sobre-la-canonizacion-de-juan-pablo-ii.htm